En Dinamarca, hay bibliotecas donde se puede pedir prestada a una persona en lugar de un libro para escuchar la historia de su vida durante 30 minutos. El objetivo es luchar contra los prejuicios. Cada persona tiene un título: «desempleado», «refugiado», «bipolar», etc. pero al escuchar su historia, te das cuenta de lo mucho que no debes «juzgar un libro por su portada». Este innovador y brillante proyecto está activo en más de 50 países. Se llama «La biblioteca humana».
